La situación en el transporte público se encuentra al borde de la crisis, según advirtió la Unión Tranviarios Automotor (UTA) en el marco de una audiencia conciliatoria realizada el 13 de enero de 2025. Durante la reunión, convocada por el Ministerio de Capital Humano, el sindicato expresó su profunda preocupación por el incumplimiento en el pago de salarios a los trabajadores del sector, algunos de los cuales aún no recibieron el pago completo de sus sueldos de diciembre.

En un contundente comunicado, la UTA destacó que «la situación se está volviendo insostenible» y acusó a las autoridades de no brindar respuestas efectivas ante las reiteradas solicitudes del gremio para garantizar la continuidad del sistema de transporte. Además, alertaron sobre el impacto que esta falta de pago está teniendo en los trabajadores, quienes se encuentran cada vez más empujados hacia el conflicto.

Desde la UTA, liderada por Roberto Fernández, afirmaron que algunas empresas de transporte aún no pudieron abonar los salarios y advirtieron que, de persistir esta situación, no tendrán más alternativa que tomar medidas de fuerza para evitar mayores perjuicios a los trabajadores. «Si se continúa de este modo, no quedará más remedio que realizar medidas para evitar los mayores perjuicios a los trabajadores y su sustento», afirmaron.

El sindicato también hizo hincapié en la necesidad de encontrar una solución estructural al sistema de transporte, planteando que no están en contra de un cambio, pero insistieron en que si el Estado decide reducir los subsidios destinados a los salarios, esto no debe implicar que se impida un aumento en las tarifas. «El dinero de nuestros salarios debe surgir de alguno de los recursos que abastecen el sistema», indicaron.

Por su parte, los empresarios del sector trasladaron la responsabilidad a la gestión del gobierno, señalando que la crisis económica que atraviesa el transporte se debe a la falta de adecuación de las tarifas y compensaciones tarifarias, que cubren solo el 40% de los costos reales del sector. Además, destacaron que la demora en el pago de estas compensaciones está llevando a las empresas a una situación de endeudamiento excesivo, lo que pone en peligro su viabilidad y genera incumplimientos en los pagos a proveedores, salarios y tributos.

La situación continúa siendo crítica y, mientras tanto, la UTA y las empresas del sector se encuentran en un tira y afloje con el gobierno, sin vislumbrarse una solución inmediata que permita estabilizar el sistema de transporte y garantizar el pago de los salarios de los trabajadores.