Ángel Miguel Lemos, ex inspector de tránsito, reflexiona sobre las dificultades y desafíos del trabajo en la calle
Actualidad 18/12Ángel Miguel Lemos, ex inspector de tránsito, compartió sus experiencias y reflexiones sobre la compleja realidad del trabajo en las calles y la creciente problemática que enfrentan los trabajadores del área, especialmente aquellos que realizan tareas de control de tránsito y los deliverys.
Lemos relató un accidente personal que marcó un punto de quiebre en su vida profesional. "Venía bastante complicado, justo unos años antes tuve un accidente. La pasé mal, porque el día que me chocaron no me presenté en ningún lado para que me atendieran, y fui al otro día. Comencé a tener complicaciones, y a partir de ahí surgieron varios problemas", explicó el ex inspector, quien relató cómo esa experiencia lo afectó tanto en lo personal como en su labor.
A continuación, Lemos relató un incidente en el que estuvo involucrado mientras dirigía el tránsito en un cruce de la ciudad: “Estaba dirigiendo el semáforo de Belgrano, 645, justo ante el puente. Me estaban pidiendo atención por la contaminación del arroyo. Mientras manejaba el tránsito, una señora se mandó y, cuando me di vuelta, ya tenía el auto encima”, recordó, haciendo hincapié en los peligros que implica su trabajo diario.
Uno de los temas que más preocupa a Lemos es la situación de los motociclistas, en particular los deliverys, quienes se han convertido en una de las principales preocupaciones para los inspectores de tránsito. "Veo muchos chicos trabajando en motos que no tienen absolutamente nada en regla. Muchos van colgados, sin casco, sin luces, sin patente. Y eso genera un gran peligro tanto para ellos como para el resto de la gente", señaló. Aunque Lemos destacó que no todos los motociclistas que realizan entregas son responsables de estos problemas, expresó que la conducta de algunos genera una mala imagen para el resto. "Por culpa de uno o dos, a veces pagan la gran mayoría", dijo.
Lemos también abordó las dificultades que enfrentan los inspectores durante los operativos de control. Recordó una situación específica en la que, durante un operativo nocturno, uno de los deliverys se escapó al retroceder en medio de un control, lo que generó una situación complicada. “Estuvimos en un operativo 70, creo que 70 personas en el operativo, y uno de los deliverys se fue marcha atrás escapándose del operativo", relató. Además, mencionó que en algunas ocasiones los operativos se complican debido a la falta de recursos, como la escasez de móviles adecuados. "Nosotros teníamos el FIA 1, pero se rompían mucho. Al final nos quedábamos con pocos móviles, lo que complicaba aún más las cosas", explicó.
Una de las principales críticas de Lemos es la falta de autoridad y recursos suficientes para hacer frente a la creciente cantidad de infracciones. “En los colegios, por ejemplo, veo a madres con tres chicos en una moto sin casco. No sé si la policía tiene autoridad para detenerlos, pero es una realidad que está ocurriendo. A veces, con la nueva patrulla, parece que nada se puede hacer”, se lamentó.
Lemos también destacó que, a pesar de los esfuerzos, el trabajo en tránsito es abrumador, especialmente en turnos nocturnos donde la cantidad de móviles y personal disponible es limitada. "Nosotros teníamos pocos móviles y a veces se nos hacía imposible cubrir todas las necesidades. Salíamos de noche con lo que podíamos, pero no alcanzaba", reconoció.
En conclusión, Ángel Miguel Lemos ofreció una mirada realista sobre los problemas que enfrentan los inspectores de tránsito y los trabajadores del sector, destacando la falta de recursos, la creciente inseguridad en las calles y las dificultades para regular el caos vehicular que afecta a las grandes ciudades. La falta de autoridad efectiva y el poco apoyo institucional son, según Lemos, dos de los principales obstáculos para mejorar la situación del tránsito y la seguridad vial.