
El retiro de Halliburton de Chubut y los 300 despidos: una doble crisis para el sector petrolero
Afiliados 25/03
Jorge "Loma" Ávila, secretario general del Sindicato de Petroleros Privados, confirmó este lunes que la multinacional Halliburton ha decidido retirar sus operaciones de la provincia de Chubut, trasladándolas a Vaca Muerta, en Neuquén. La medida impactará directamente en la fuente de empleo de 300 trabajadores petroleros, de los cuales 140 son operativos y 160 pertenecen a puestos jerárquicos.
Ávila, quien también ejerce como diputado nacional, detalló la difícil situación que enfrenta el sector en Comodoro Rivadavia. La empresa, con sede en la región, ha tomado la decisión de reubicar sus actividades en el yacimiento neuquino, lo que pone en evidencia la falta de inversiones en la cuenca chubutense, que se encuentra cada vez más madura.
En declaraciones a los medios locales, Ávila resaltó que, aunque los despidos son inevitables, los trabajadores recibirán todas las indemnizaciones correspondientes. "La gente va a cobrar todo lo que se le debe. Ahora nuestra tarea es ver cómo reubicamos a aquellos que quedan afuera", expresó el líder sindical. Sin embargo, la reubicación resulta compleja, ya que el panorama en Chubut sigue siendo incierto.
El gremio está explorando opciones para conseguir nuevas fuentes de empleo para los despedidos, principalmente en Comodoro Rivadavia. Sin embargo, Ávila fue claro al reconocer que el mercado laboral en la región se ha estancado y que las posibilidades de conseguir nuevos puestos dentro de la misma cuenca son limitadas. "Nos encontramos con una cuenca madura, que no recibe las inversiones que requiere", sostuvo.
Por otro lado, algunos trabajadores podrían considerar la opción de trasladarse a Neuquén, aunque esta decisión dependerá de la situación particular de cada empleado. "Si hay alguien que se quiere ir, se irá", comentó Ávila, quien también señaló que aquellos que acepten la reubicación recibirán un 120% de indemnización, además de su liquidación final.
Este anuncio llega apenas horas después de que Ávila fuera uno de los pocos dirigentes sindicales que apoyaron la reciente votación en el Congreso que aprobó el endeudamiento del gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI), lo que generó controversia en varios sectores de la oposición. La decisión del sindicalista de respaldar este acuerdo económico, que favorece la política económica del gobierno de Javier Milei, añade complejidad a la situación, generando tensiones dentro del propio movimiento obrero.
A medida que los despidos se concretan y la crisis se profundiza, Ávila y su sindicato intentan encontrar respuestas para mitigar los efectos de esta doble crisis: la deslocalización de Halliburton y el impacto del acuerdo con el FMI. El futuro del empleo en la región está cada vez más en jaque, y la incertidumbre sobre el rumbo de la actividad petrolera en Chubut crece con cada día que pasa.