A medida que se aproxima la finalización del actual acuerdo de Facilidades Extendidas (EFF) con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el ministro de Economía, Luis Caputo, y su equipo se reunieron con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, y la subdirectora, Gita Gopinath. En el marco de la reunión anual del Fondo y el Banco Mundial, ambas partes coincidieron en que el encuentro fue “muy bueno” y se centraron en las prioridades para la relación futura entre Argentina y el organismo.
Georgieva destacó el progreso de Argentina en la estabilización de su economía, enfatizando la importancia de apoyar a los sectores más vulnerables. En sus declaraciones, también subrayó que el FMI sigue comprometido en ayudar al país a alcanzar una economía más próspera. A pesar de los elogios, no se discutieron detalles sobre la obtención de nuevos fondos.
La conversación se extendió por más de media hora y se centró en la evaluación de los indicadores económicos argentinos. El FMI prevé una caída del 3,5% del PBI para este año, con una expectativa de recuperación del 5% para 2025. Sin embargo, el discurso de ambas partes evitó profundizar en la posibilidad de un nuevo financiamiento, a pesar de que Caputo había indicado previamente que un nuevo programa debería incluir "fondos frescos".
El equipo de Caputo intenta minimizar las expectativas sobre un nuevo acuerdo, insistiendo en que no se realizó un pedido formal ni se discutieron montos específicos. Sin embargo, el ministro reconoció que para iniciar el proceso de negociación, Argentina debe presentar una solicitud formal. El acuerdo actual vence en diciembre, y existen múltiples vías para solicitar un nuevo programa, incluyendo la posibilidad de unificar revisiones o solicitar excepciones.
En resumen, la relación entre Argentina y el FMI continúa en una fase crítica, con avances en la discusión pero sin compromisos concretos sobre nuevos fondos, a medida que el Gobierno analiza sus opciones y el contexto económico global.