Este martes, la Asociación Bancaria, bajo la dirección de Sergio Palazzo, logró un acuerdo salarial crucial con las cámaras empresarias del sector bancario, que asegura un ajuste basado en la inflación acumulada hasta junio de 2024. El acuerdo estipula un incremento que se alinea directamente con la inflación del mismo mes, con el objetivo de proteger el poder adquisitivo de los trabajadores del sector.

El nuevo ajuste se aplicará a todas las remuneraciones mensuales brutas, tanto normales como habituales, e incluirá los conceptos remunerativos y no remunerativos, así como los adicionales convencionales y no convencionales. Las empresas están obligadas a abonar la diferencia entre la inflación acumulada de enero a junio de 2024, que alcanza el 79,8%, y el aumento total de 71,9% otorgado en 2023. Esta diferencia se sumará a los salarios de julio.

La Asociación Bancaria subrayó la importancia de este acuerdo al afirmar que ha logrado garantizar, una vez más, la aplicación de los índices inflacionarios mensuales. “Con este ajuste, buscamos que los trabajadores bancarios mantengan su poder adquisitivo frente a la inflación, asegurando que no pierdan poder de compra”, expresó el sindicato en un comunicado.

Este acuerdo es una medida clave para mitigar el impacto de la inflación sobre los salarios del sector bancario, asegurando que los trabajadores mantengan su capacidad de compra a pesar de los desafíos económicos actuales.