Hugo se prepara: Pablo Moyano renuncia a la co-secretaría de la CGT por diferencias con la 'mesa chica'
Política gremial 08:15El dirigente sindical Pablo Moyano presentó este viernes su renuncia a la co-secretaría general de la Confederación General del Trabajo (CGT), argumentando su desacuerdo con las decisiones tomadas por la llamada "mesa chica" de la central obrera. La noticia, que sacudió el cierre de la semana en el ámbito sindical, era esperada debido al creciente enfrentamiento entre Moyano y el ala más dialoguista de la CGT.
En una carta dirigida al Consejo Directivo Nacional de la CGT, Moyano expresó: "Me dirijo a ustedes para comunicarles que he tomado la decisión de renunciar a mi cargo como co-secretario general de la Confederación General del Trabajo, al no coincidir con las decisiones tomadas por la llamada ‘mesa chica’". La renuncia, sin embargo, no implica la salida de Camioneros de la CGT, puesto que el sindicato continuará dentro de la central, y ahora se deberá definir qué dirigente de la organización ocupará su lugar en la mesa directiva.
La renuncia de Moyano se inscribe dentro del conflicto interno de la CGT, donde los sectores de los "Gordos e Independientes", quienes abogan por el diálogo con el gobierno y los empleadores, han contado con el apoyo del líder de Camioneros, Hugo Moyano, padre de Pablo. En los últimos días, Hugo Moyano habría tomado la iniciativa de contactar a varios dirigentes clave de la central para respaldar la postura dialoguista y desautorizar a su hijo, quien se mantenía firme en una línea más combativa. Esta situación se volvió insostenible para Pablo Moyano, que decidió renunciar antes de lo previsto. Originalmente, había pensado en concluir su mandato y alejarse para concentrarse en su rol al frente de Camioneros, pero la tensión interna terminó por precipitar su salida.
La dimisión de Pablo Moyano profundiza las divisiones dentro de la CGT, que ya había comenzado a mostrar fisuras con la renuncia del secretario gremial Mario “Paco” Manrique del SMATA, en un claro indicio de las tensiones al interior de la central. El enfrentamiento quedó más evidenciado esta semana, cuando una decena de dirigentes se reunieron en la sede de la UPCN y decidieron desestimar el pedido de los gremios combativos de convocar a un paro general antes de fin de año. “No es el momento”, sostuvo Andrés Rodríguez, secretario adjunto de la CGT, dejando en claro la distancia entre los sectores moderados y los más combativos.
La renuncia de Pablo Moyano y las tensiones crecientes en la CGT reflejan el difícil panorama interno de la central, que se enfrenta a la presión de definir su rumbo frente a las políticas del gobierno y los reclamos de los trabajadores.